El sexo en la pareja

Un gran trabajo... ¡¡¡el sexo en la pareja es un gran trabajo!!! Corrígeme si me equivoco... me refiero al que se tiene con LA MUJER DE LA VIDA, con la que además se tiene la suerte de casarse (¡no has dicho nada!). 

Al principio seguro que son fuegos artificiales que ni en la franja de Gaza, pero con el paso del tiempo y la evolución de la relación y todos los entresijos que inevitablemente vienen (aparte de la rutina, las riñas por la casa, la que te gusta no te gusta, y la suegra que cae enferma, y un retraso de tres meses que gracias a Dios se soluciona pero que provoca un cambio de perspectiva, el contrato de trabajo caducado y no renovado, el flechazo a medias con el corredor del parque o el tanga de la de las rocas.... ) amenazan de verdad el rapto que te lleva a una mamada al vuelo en el garaje del bloque de pisos, antes de subir con las bolsas de la compra y a tomar por culo con los congelados y la cena que hay que preparar, que en menos de dos horas llegan los cuatro padres para celebrar el cumpleaños del niño... 

Las payasadas de ejemplo que he enumerado tienen al menos un efecto anticonceptivo/estrechecedor de la sexualidad acrobática de los primeros tiempos (casi tanto como los rulos, los pijamas de forro polar y las babuchas Disney, ¡quien las use en presencia del marido debería ser sancionado penalmente!)... ¿Tengo razón? 

Claro, el principio, cuando se está ENAMORADO no es ASOMBROSO, es más, estar el uno dentro del otro es lo más correcto e ineludible de toda la historia del mundo, luego poco a poco.... 

Es casi imperceptible, pero la frecuencia se adelgaza, y también la intensidad de los gestos y las sensaciones resultantes se 'redimensionan', se 'difuminan', se 'diluyen'... Quizá sea cuestión de años, pero al cabo de cinco, al volver de la oficina con el atasco, apenas hay urgencia por abrirla como una manzana, apenas da tiempo a cerrar la puerta de entrada y golpearla contra el suelo de mármol de la entrada... ¿Me entiendes?

Pero también es consolador y tranquilizador tener ese cuerpo que amas y que te ama, que te acoge y que te conoce y te reconoce, que sabe cómo hacer que te corras, que se mueve de esa manera tan acertada cuando siente que estás a punto de correrte... ¿Cómo renunciar a todo eso?

Pero sobre todo: ¿cómo hacer para que ese cuerpo que me ama siga siendo inalienable, a pesar de nuestros defectos mutuos? Que ninguna otra distracción arruine el matrimonio (y la relación con los hijos y con el banco por la hipoteca, y con los suegros que "¡le dijeron desde el primer día que esto acabaría así!")... Hay muchas maneras, una de ellas es la de "ponerle picante al culo", y entonces claro que hace falta compromiso, mucho trabajo, con razón... Pero es un trabajo para dos, porque en este sentido, la colaboración es tan necesaria como el aire que se respira. ¡In absentia, flab! 

¿Cómo hacerlo? En primer lugar, el respeto, que no debe faltar nunca (el amor puede acabarse, y eso es casi siempre inevitable, porque no somos halcones, lobos o pingüinos), pero a pesar de todo, ¡EL RESPETO NO DEBE FALTAR NUNCA! En el altar, ante ese ejército de invitados que no ven la hora de atiborrarse, sólo se debe jurar respeto eterno, no amor, porque el AMOR (y la atracción física) con el tiempo, a su antojo, se transforma y sin respeto se extingue, la falta de respeto pulveriza el AMOR... porque el respeto es lo que impide que la relación se mate sin posibilidad de apelación. Aunque sólo sea porque si respetas a la otra persona, aunque ahora seáis hermanos, las peleas serán más razonables, menos devastadoras y desagradables, no serán sin retorno y, sobre todo, los abogados costarán menos (por Dios, que no quiero a los abogados).... 

Entonces, ¿cómo evitar que el AMOR y la atracción física se extingan demasiado rápido?

Esto hay que trabajarlo desde el principio, ¡desde el momento en que te das cuenta de que ES LA PERSONA ADECUADA! ¡Hace falta valor e imaginación! ¡Y no pensar que <<¡¡esta mi mujer nunca será capaz de hacerlo!!!>> Por poner un ejemplo: De Niro en "Terapia y balas" le explica a Billy Crystal que al amante le da por hacerse mamadas porque su mujer no puede, porque ¡ay de la boca besando a mis hijos...!  

No temas dejar que la mujer que amas exprese libremente sus fantasías y deseos, sobre todo al principio, y con el paso de los años nunca dejes de contárselos, pídele que se abra, haz que confiese lo inconfesable, que saque a relucir lo podrido, no temas seguirla hasta el lavabo del restaurante para follártela como si fueras un desconocido con el que tener sexo tórrido y lascivo, para consumirte incluso prometiéndole apresuradamente que la seguirás a casa <<para continuar>>. Eso sí, cuando empiece a confesarse, tendrás que aceptar sus confidencias INCONDICIONALMENTE, tomar nota de ellas y aceptarlas INCONDICIONALMENTE como parte de ella... Eso sí, como precaución, ¡escúchala sentado! 

Por ejemplo, tiéntala con las cosas más indignas incluso mientras elige la pasta en el supermercado y no sólo cuando la estés lamiendo (<<¡Cómo me gustaría hacer un concurso con alguien -o de alguien- para ver quién la lame mejor!>>). Ven a casa con algún libro de literatura erótica o porno, o un kamasutra y practica lo que lees, sin escatimar en expediciones punitivas a algún sex shop. 

SI tienes el valor de superar los límites del impulso genético que por desgracia te posee, entonces todo será más fácil. También porque junto con ese maldito instinto, ¡están las herencias culturales y religiosas que lo acompañan! ¿Qué es la urgencia genética? La urgencia genética es un instinto, es esa "cosa" por la que los perros machos levantan la pata en otro árbol incluso después de seis horas de paseo para marcar su territorio. Es ese sentimiento de fastidio (¡o rabia!) que sientes por la ex aunque ya no te atraiga, aunque la hayas dejado, pero si te enteras de que se ha liado con otro, te fastidia o te cabrea. Es esa cosa por la que si la chica a la que descuidaste y podrías haber tratado mejor te deja, te sientes con derecho a acosarla, si no hasta a enterrarla después de la última aclaración... Y no me digas que no es verdad, porque nos han matado durante milenios, desde que el macho se dio cuenta de que es el esperma el que da lugar a un hijo, un hijo por el que hay que ir a cazar (¡hoy, a trabajar! ) arriesgándose a morir y sacrificando energía y recursos, así que más vale que ese hijo sea mío, o si no... Y todo este modus pensandi cuenta con la bendición de las tres grandes religiones monoteístas (¡porque fueron fundadas por hombres!)... ¡y también de las madres! Las madres de los hijos varones son las mayores defensoras del machismo; en cuanto a machismo, ¡le dan por culo hasta a Mussolini!

Esto lleva a diferenciar dos grandes categorías: ¡las mujeres para follar y las mujeres para casarse! Las de follar son las llamativas, quizá un poco chillonas y/o chillonas, que pueden/deben hacer lo imposible en la cama, la que puede tener orgías, la que puede ser lesbiana, ¡pero nunca, nunca se te ocurriría introducirla en tu vida "normal", presentarla como novia en tu comida de los domingos en casa de tu madre y parientes! 

Luego están las que se van a casar, las chicas buenas, ILLIBRADAS/ASEXUADAS, las que apenas notas, con ropa sobria, casi casta, que sabe planchar camisas y hacer lasañas como las de mamá (casi, ¡mamá es inalcanzable! ), que está preparada para la horca una vez al mes, que sólo te deja verla los sábados por la noche, con la luz apagada (¡así la ves muy poco!) tú encima y ella debajo, y que no pasas de <<que luego se arrugan las sábanas y ciertas cosas que yo no hago, no soy de esas, ¡yo! Si quieres hacer otra cosa, ¡vete a otra parte! >> Y si te vas a otra parte, ella te esponjará con la pensión alimenticia. Pero al fin y al cabo, alguien así hace que tú también la quieras, porque si no le gusta contigo, tampoco le gusta con los demás (¡iluso!), y luego ay si su boca besa a mis hijos... ¿Me equivoco?

Yo lo veo de otra manera, porque puedo garantizar que también las mujeres tenemos impulsos sexuales inconfesables (es decir, inconfesables porque no podemos confesarlos, gracias a esos putos dictados religiosos/culturales, o mejor dicho, ¡ACULTURALES!) que no queremos confesar al hombre que deseamos y con el que nos hemos casado, porque si no se haría una idea equivocada de nosotras. Le haríamos quedar mal en la comida del domingo con la familia. 

Sólo que con los años, la sexualidad "aséptica" de la mujer recatada se extingue en tres meses, no en años, y entonces uno se convierte realmente en hermano y hermana ¡y los defectos del otro se vuelven realmente insoportables! ¿Estoy en lo cierto?     

Seamos realistas, después de años, siempre el mismo coño te aburre, ¡y a nosotras las mujeres también! ¡Aquí hay una cosa que no podemos confesar! Pero te lo diré: DESPUÉS DE UNOS AÑOS, LA MISMA POLLA NOS ABURRE, ¡LO SABES! Y así, en previsión de este aburrimiento, preparaos los dos desde ya, desde antes de la evolución emocional y sexual que inevitablemente se produce. Inevitablemente porque no somos halcones, pingüinos o lobos. Biológicamente hablando, ELLOS nacieron para estar juntos hasta que la muerte los separe, ¡pero nosotros no! Entonces, SI la relación ha durado afortunadamente 20/30/40 años, desafiando las herencias aculturales, al primer tufillo de aburrimiento, tuyo o de él, no tendrás miedo de poner en práctica tus fantasías, ¡porque a lo largo de los años, desde el principio os habéis confesado y prometido! Sobre todo las que van más allá o contradicen el hipócrita pensamiento pequeñoburgués, y por eso empezáis con un poco de locura, no digo llegar a los niveles del marqués Casati Stampa y su esposa Anna, que luego tuvieron un mal final (¡vete a la wikipedia! ) un fin de semana en un balneario o para un curso de tantra, y si eso no es suficiente, hay vacaciones aparte, o un viaje a un club privado, o intercambio... ¡Considero que el intercambio es positivo, porque puede ser un motivo de complicidad y no de división, como puede ser una relación clandestina o un viaje de putas! Con el intercambio no hay subterfugios, ni engaños, ni mentiras, ¡que es la verdadera falta de respeto! ¡Lo que sucede durante una reunión de swingers es buscado y aprobado y aceptado por todos! Y luego el picante en el culo que te pone el intercambio de parejas... Como apenas la mirabas, si la ves lidiando con dos pollas nuevas, ¡tu mujer vuelve a ser el objeto de deseo de los primeros tiempos! ¡Ídem para ella, ver cómo tu polla desaparece en el coño de una y sale chorreando para ser limpiada por la boca de otra!        

Descubrirá lo bueno que es ser chupado por dos bocas entusiastas, una de las cuales lo hace con más urgencia porque quiere ser mejor que la "nueva", o lo excitante que es follarse a la vez a tu mujer con otra polla, ¡ese mismo coño que has lamido infinidad de veces y que castigarás en cuanto hayas cerrado la puerta! Y sin saber que ella, nada intimidada, seguirá masturbándote incluso en el coche mientras conduces a casa a las 4 de la mañana ¡como la última de las guarras!  

De vuelta a los celos de los primeros días que reavivan la relación y el deseo de seguir juntos, de envejecer juntos, para siempre. Y si, para conseguir este para siempre, es necesaria alguna distracción, que así sea, mejor alguna TRANSGRESIÓN alegre y despreocupada juntos que un desgraciado divorcio, que os llevaría a recaer en un piso de una habitación, a hacer ahorros verdaderamente humillantes y a pasar los domingos en Cáritas por un plato caliente, a perder la estima de vuestros hijos, etc. etc. ¿Apoyas esto? (Ahí no, un poco más abajo, ahí, ¡bravo, gracias!)  

¿Me lo hace saber? Siempre espero opiniones, confiésamelas, acostúmbrate a sacar lo podrido, con Masha se puede hacer.... 

Un abrazo, M. Masha, +39349.6521447